martes, 22 de mayo de 2012

Barrio, piña y fulbo federal


La sangre que corre en las venas del Interior del país, con respecto al fútbol supera cualquier frontera y toca todo cielo. La gema futbolera se nutre de lo federal. Es donde más se ama al deporte, el amateurismo renace y, por ende, se sufre al máximo. El equipo del barrio no se mancha. Historias son las de pueblos y hay miles y exquisitas.

El TDI (Torneo del Interior) reúne 352 equipos desde Jujuy a Tierra del Fuego, de San Juan a Corrientes, siendo la divisional con más equipos en el mundo. Un verdadero orgullo nacional.

Esta competición otorga tres lugares para el Torneo Argentino B y este fin de semana se completaron las idas de las tres finales. Los equipos que juegan este sueño son: Deportivo Aguilares de Tucumán y Estudiantes de San Luis; River de Embarcación de Salta y Sportivo Rivadavia de Venado Tuerto; e Independiente de Neuquen e Independiente de Chivilcoy.

De público conocimiento, al menos Olé informó patéticamente algo, fue "La Batalla de los Diablos".

El fútbol neuquino (de lo más débiles de Argentina) afronta su segunda final en torneos de ascenso con el apoyo fundamental de su gobierno provincial y "La Banda del Zanjón" chivilcoyana logró su mejor resultado desde que comenzó a participar del torneo.

Este domingo se jugó la ida para el ascenso en Neuquen y hubo tongo. El match se picó desde el arranque y con el conjunto bonaerense mostrando picardía y suciedad en la cancha (como se debe jugar una final barrial plasmado a lo profesional): patadita, cortito al hígado, insultos a mamá, hacer tiempo, etc. De a poco los sureños fueron entrando, el pito (Sanjuanino el) dejaba pasar cosas extrañas para los locales y saltó la bronca.

En el entretiempo, reunión en la mitad y ¡al mismo vesturario!. Si, el estadio La Chacra de Independiente de Neuquen es muy precario. Y allí, un insulto al aire y tole tole para todos. Se vieron tachos de basura por el aire, puños cerrados al viento, griterío, sangre. La policía, bien gracias. Y todavía faltaba disputarse el segundo tiempo.


Ya en el complemento, un jugador neuquino acusó al DT visitante de coimas y aprietes. Desde ese momento, la esencia del fútbol como juego, se esfumó. Murras violentas, codazos. Y comenzaron a llover las tarjetas rojas: tres expulsados chivilcoyanos. Sobre el minuto 33 llegó el gol del Rojo del Sur. Finalizando el encuentro (entrecortadísmo), el entrenador del visitante satisfecho con la diferencia mínima, se detecta un futbolista chivilcoyano escondiendo y/o/u robando dos pelotas. En esa gresca Andrés Pellerano delantero de Los del Zanjon, le aplicó un frentazo sin piedad, simil Zinedine Zidane, a un defensor local. El partido se detuvo 10 minutos por el escándalo.

En fin, las estadísticas mandan y dicen que hasta el momento la serie está Independiente de Neuquen 1 - Independiente de Chivilcoy 0. Falta la vuelta y el resultado se mantiene abierto. Se vienen chispas este domingo y estaré presente.

"La Perla del Oeste, donde se concretó mi natacilio, espera "ansiosa". Aseguran que en la ciudad ya hay carteles, que la minoría tilda como subliminal,anunciando "Te reserve el hotel, Neuquen".

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